La apnea o buceo libre (freediving) es un
deporte extremo, el cual tiene como base la suspensión voluntaria de la
respiración dentro del agua mientras se recorren largas distancias o se
desciende hasta grandes profundidades. Esta suspensión voluntaria de la
respiración es, asimismo, la base de una actividad milenaria y vigente
como la pesca submarina a pulmón, practicada, por ejemplo, por las ama en Japón, por los bajau en Indonesia y Filipinas, y por los wayú en Colombia y Venezuela. Aunque, en un principio, pueda parecer entrenamiento físico, el deporte
de la apnea se basa principalmente en la relajación mental del
individuo, la buena alimentación e hidratación, el fomento de los
reflejos mamíferos en humanos, y el entrenamiento en ambientes de hipoxia
y de presiones hidrostáticas altas donde los gases se comprimen
dramáticamente y el volumen de los pulmones se ve considerablemente
reducido.
Esta muy particular actividad practica el descenso a la profundidad del mar a pulmón libre, es decir, sin equipos de submarinismo tradicionales como el esnórquel.
En un principio la disciplina permitía descender unos pocos metros (30
metros con peso variable en 1949) pero, a medida que se fueron
sofisticando las prácticas, alcanzó a sobrepasar el límite de 120 metros
con peso variable,1
por lo que se requirió de una cuerda atada a un ancla perfectamente
vertical para evitar la desorientación del apneísta. Con este mecanismo
sólo se sigue la cuerda en el descenso y ascenso sin la necesidad de
orientarse abriendo los ojos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario